Tú me vuelves loca.

 Tú me vuelves loca... 

Ha dejado de ser tu rostro, aunque más de uno sabe que tu carita es hermosa. No es eso lo que me ha vuelto loca, porque si bien no paro de presumirte, de decir que me fascina tu rostro sin imperfecciones y tus ojos café clarito... Que la delicadeza y el cuidado de tu cabello me hipnotizan... Recuerdo haberte conocido con un color intenso, estaba bastante bien teñido, y bastante bien peinado, sabes que eso combina perfecto con la claridad de tu piel. Recuerdo que hubo un día en el que me fascinabas físicamente, y no quiero decir que has dejado de hacerlo, pero como lo dije anteriormente, hubo un día en que me di cuenta que eras mucho mas que eso. Entonces dejé de sentirme culpable, por qué como no me iba a enamorar de todos tus detalles, y hablo de esos detalles en lo que me ponías atención, y de esos en que llegabas, o mejor dicho, llegas y al abrir la puerta de la recámara gritas "¡Hola mi amor!" efusivamente mientras sonríes, esos detalles y momentos en que corres a abrazarme y verme a los ojos, en qué me dices lo bonita que te parezco aunque mi imagen luzca afectada, amo esos detalles en que te preocupas por mí y me preparas la comida, o me cumples todos esos mínimos antojos. Esos momentos en que me dices que no adelgace ya, en que te digo que detesto mi panza y me dices que la amas... Todo eso que me vuelve loca, amo tu cara pero además de la perfección de tu piel, amo las líneas dibujadas entre ella, amo el rastro del tiempo sobre tu cuerpo, porque quisiera entrevistar a cada una de ellas y que me contara toda su historia con lujo de detalle. Quisiera preguntar al brillo de tu mirada qué ha pasado y qué ha sido de ti antes de mi.

Quisiera abrazarte y jamás soltarte... Me haces sentir que no importa el tiempo que dure la vida mientras sea contigo. Me enseñaste a amar todas esas cosas cotidianas que antes subestimaba... Y no quiero demeritar a mi pasado, pues tengo claro que ha sido parte de quien soy ahora. Ahora pienso que simplemente las cosas son como deben ser. Ahora me queda claro que si alguien forma parte de mi pasado, es porque fuimos mucho, pero fuimos y ahora cada parte debe continuar su vida. Creo que son parte de mi felicidad ahora, y espero ser, en alguna galaxia extraña o mundo paralelo ja, parte de la felicidad de su felicidad ahora... Claro que extraño algunas cosas, pues el pasado muchas veces duele... Pero a veces quisiera que se entendiera que estoy bien... Que no ha sido mi culpa, ni la tuya, que no ha sido culpa de nadie.

Me gustaría expresar, sin afán de herir o remover alguna fibra sensible, que durante mucho tiempo sufrí mucho y quizá jamás lo dije, y por muchos años mi corazón estaba casi marchito, y un día llegaste... Y me diste más de lo que podría esperar... Que simplemente ahora es nuestro momento.

Nadie imaginó lo vacía que me sentía, y no era por nadie más... Era por mí... Pues cada persona de mi pasado hizo mucho, no puedo quejarme pues recibí mucho amor, y recibí muchas cosas buenas, y me hicieron tener una vida increíble, pero no sé si han experimentado esa sensación en que por alguna extraña, muy desconocida razón la vida estpa incompleta, y algo falta, algo muy esencial en el alma... Es realmente frustrante no poder encontrarlo. Como lo es quedarse horas en el auto sin saber por qué...

Como lo es manejar sin sentido esperar que alguna desgracia suceda y apague todo.Como lo es el deseo ferviente de morir... Esto no es una carta en la que busque justificarme, tan sólo liberarme, no de nadie más, solamente de mi.

Y tú no tuviste la culpa... De nada, ni siquiera sé cómo pasó, ni siquiera sé cómo te enamoraste de mi... Ni siquiera sé cómo me enamoré de ti, pues sólo recuerdo que al principio eras medianamente cruel con mis emociones, pero sabes... Había algo que no me pemritía separarme de ti, y no es que quisiera yo salvarte... Pero había una energía extraña cada que te tenía cerca, cada que veía alguno de tus mensajes, en los cuales realmente no había nada comprometedor, pero sentía que debía ser yo... Tuve esa extraña sensación... Que debías ser tú y debía ser yo...

Que era yo quien te quería sin importar quién eres, quién habías sido... Sentí que te conocía, y que el sol nos iluminaba del mismo ángulo a las dos. Comencé a sentir que tu mirada era primordial, y que tu energía era en parte para mí.

Aun recuerdo lo nerviosa que me puse, aun recuerdo esas veces en que te vi esperando que ya no me gustaras más, que ya no me atrajeras como imán... Te juro que no sabía por qué... 

Tú me hiciste recordar algo que viví muchos años atrás... Me recordaste una sensación particular... Me recordaste esa sencillez de la vida... Me recordaste la simpleza y la cotidaneidad. Me recordaste los sueños sencillos que tenía... Yo sólo quería calentar la cena mientras veía el atardecer y un perro en el patio... Aun recuerdo el aroma de tu casa... Te juro que ese aroma ya lo había percibido antes, no sé en qué vida.

Recuerdo un día haber mencionado en voz alta mientras me encontraba sola... "Te encontré..." porque eras todo aquello que buscaba sin siquiera recordarlo.

Yo ya te amaba... Desde años antes sin saberlo, y estoy segura de que si existen otras vidas te conocí en alguna de ellas... Porque entre muchos de mis defectos puedo decir que conozco mi alma, es por eso que al sentirla perdida, al sentirme tan desconectada de ella quería destruir mi misión aquí en la tierra.

En fin, el tiempo pasó... Y te amo... Te amo por todo lo que me das... Por tu romanticismo, por priorizarme, por decirme "mi amor" donde quiera que estemos... Te amo por ser esa hermosa persona que eres... Por amarme tan cual soy... Por trabajar tan duro, por esos regalos que me haces llegar bajo circunstancias difíciles. Por acurrucarte en mi hombro sin importar nada más... Por enamorarme de los postres y las tardes de películas... Porque contigo prefiero estar a solas en el colchón, que estar con cualquier otra persona o realizando cualquier otra acitividad...

Te agradezco y te amo por esos besos que me llevan al universo... Por no racionarlos, por darmelos como si no hubiera un mañana... Por esos momentos acalorados y mágicos de la cocina... Por no racionar nada de lo que sientes hacía mi... Por no ir despacio... Por ir tan rápido o lento como querramos... Por esas veces en que invado tu plato, tu tiempo y hasta tu cuerpo... Por dejarme saciarme de todo lo que quiera de ti. Por siempre compartir conmigo... Por mostrarme tus celos, por no soltarme, por aferrarme a ti cada noche... Te juro que me haces sentir única en el universo... 

Y estoy segura de que todos merecemos un amor así... Yo no podía dejarte ir... Y ahora que lo veo, creo que por más entrega que haya habido en el pasado... No era yo... No era yo la perosna indicada, porque yo espero que se enamoren como yo... Y espero encuentren a alguien con quien sientan eso que yo siento contigo... De quién no se pregunten nada, alguien a quien abracen cada noche sin dormir cada uno al extremo de la cama, alguien que te haga desearle tanto que nunca quieras a nadie más. 

Alguien que te mire a los ojos románticamente y te diga que te ama, alguien que te bese con deseo, con mucho deseo... 

Alguien que sonría a carcajadas a la misma frecuencia que tú... Que te excite pensarle. Alguien que invada tu comida, tu tiempo, tus cosas, y le recuerdes todo el maldito tiempo que lo tuyo es suyo. Alguien que sepa que eres de él o de ella. Alguien que comparta tus metas... Que desee lo mismo que tú. Alguien que sientas en el mismo canal... Alguien que no tenga fantasmas del pasado, alguien que no sea inestable... Alguien que se sienta tan seguro o segura. Todos merecemos a alguien que sonría sobre nuestra boca mientras nos muerde los labios. Todos merecemos a alguien que se acueste sobre nosotros tan sólo para verle a los ojos. Todos merecemos ese brillo en la mirada... Esa privacidad... Y que nada más importe... 

Por mi parte...